Urban Beat Contenidos

El Círculo de Bellas Artes presenta “Extrema rareza” de Flannery O’Connor en el marco de la celebración de su centenario

Hablar de Flannery O’Connor es adentrarse en esa Norteamérica donde la salvación y la bala comparten bolsillo, donde la Biblia se empuña con la misma firmeza que un revólver oxidado. Su obra, inscrita en el gótico sureño, no necesita artificios para exponer la grieta: allí están los predicadores itinerantes, los fanáticos que confunden la fe con la coacción, los racistas de misa dominical y los desheredados que avanzan hacia la desgracia como si respondieran a un designio inapelable. Bajo el título "Extrema rareza", el Círculo de Bellas Artes homenajea a la escritora estadounidense en dos jornadas que tendrán lugar los días 27 y 28 de noviembre.

O’Connor escribió desde un Sur marcado por la segregación, el fundamentalismo religioso y una pobreza estructural que se maquillaba con himnos sin ecos. Sus relatos son disecciones frías, donde la violencia aparece sin épica y la gracia irrumpe como una bofetada intelectual necesaria como mujer valerosa ante una opresión ognimiosa. La fe, en su universo, no redime sin antes destruir lo innecesario del universo de creyentes sin fe; la revelación no ilumina, sino que expone la miseria interior de personajes convencidos de estar en el lado correcto de la historia.

Esa Norteamérica bíblica que ella retrata no es un decorado exótico, sino un espejo incómodo: un país que proclama misericordia mientras consagra el castigo, que recita versículos para justificar la brutalidad, que convierte el fervor religioso en coartada cultural. Y, sin embargo, O’Connor nunca cae en la caricatura. Su mirada es severa, pero también compasiva con quienes se hunden en sus propias certezas.

Hoy, cuando el discurso público vuelve a contaminarse de absolutismos y nostalgias armadas, la lectura de O’Connor recupera su filo original. No porque anuncie soluciones, sino porque revela una verdad persistente: en Estados Unidos —y quizá en cualquier sociedad que adore símbolos antes que personas— la violencia no es la excepción, sino el precio que se paga por creer que la salvación puede imponerse por la fuerza.

En 2025 se cumple un siglo del nacimiento de Flannery O’Connor (Savannah, Georgia, 1925-1964), una autora cuya presencia no necesita estridencias para mantenerse intacta en el canon. Publicó solo dos novelas —Sangre sabia en 1952 y Los violentos lo arrebatan en 1960—, pero fue en el territorio breve donde alcanzó la cima: los relatos reunidos en Un hombre bueno es difícil de encontrar (1955) y Todo lo que asciende tiene que converger (1965) consolidaron su nombre como uno de los más incisivos de la literatura universal del siglo XX.

Hija del Sur profundo y marcada tanto por su educación católica como por la enfermedad que acortó su vida, O’Connor llevó a sus personajes hasta el borde de lo posible: criaturas extraviadas, deformadas por su propio dogma, que atraviesan episodios tan brutales como cómicos. Su escritura prolonga una genealogía exigente —Hawthorne, Poe, Dostoyevski, Henry James, Conrad, Kafka—, pero no es deudora de nadie: en sus páginas lo humano aparece sin maquillaje, obligado a enfrentarse al pecado, a la violencia, a la gracia como irrupción inexplicable y al misterio como última frontera.

El Círculo de Bellas Artes de Madrid ha decidido celebrar este centenario con un programa que apuesta  por una conmemoración merecida. Bajo la dirección de la profesora Carlota Fernández-Jáuregui Rojas (Universidad de Salamanca), las jornadas reunirán a algunos de los mayores especialistas en la introducción, edición y estudio de O’Connor en España, en un intento colectivo de volver a leerla desde el presente sin traicionar su espesor.

La crítica literaria Guadalupe Arbona, profesora de la Universidad Complutense de Madrid y editora de títulos fundamentales como El negro artificial, Un encuentro tardío con el enemigo, Misterio y maneras o Diario de oración, abrirá la reflexión con una intervención dedicada a la violencia y la ferocidad en la obra o’connoriana: no como espectáculo, sino como vía hacia una revelación incómoda. El novelista y ensayista Gustavo Martín Garzo —responsable de los prólogos a los Cuentos completos y a la correspondencia recogida en El hábito de ser— desplazará el foco hacia la fascinación de la autora por las aves, en especial los pavos reales, entendida como una señal de su afición por lo insólito y lo indomesticable.

Carlos Ortega, director del Instituto Cervantes de Hamburgo, propondrá una lectura anclada en el ahora: Flannery O’Connor en la era Trump, un tema que invita a examinar hasta qué punto la Norteamérica del fundamentalismo y la fractura social continúa dialogando con sus ficciones. Por su parte, José Manuel Correoso Ródenas, profesor de la Universidad Complutense de Madrid y autor de una amplia bibliografía dedicada a la escritora, situará su obra dentro del origen y desarrollo del gótico sureño, esa tradición que convierte la fe, la culpa y la decadencia en materia narrativa.

El programa se desplegará del siguiente modo:

Jueves 27 de noviembre (19:00 h)
Flannery O’Connor, la ferocidad de una escritura, por Guadalupe Arbona
La obra de Flannery O’Connor en la tradición literaria del gótico sureño, por José Manuel Correoso Ródenas

Viernes 28 de noviembre (19:00 h)
Flannery O’Connor en la era Trump, por Carlos Ortega
La escritura y el escándalo, por Carlota Fernández-Jáuregui Rojas
El amor a los pavos reales, por Gustavo Martín Garzo

A cien años de su nacimiento, O’Connor vuelve no para ser celebrada con suavidad, sino para recordarnos que la literatura, cuando es verdadera, no consuela: obliga a levantar la vista y contemplar aquello que preferiríamos mantener fuera del encuadre. En su obra, la gracia no suaviza el mundo: lo desgarra para revelarlo. Y esa lucidez —incómoda, luminosa, necesaria— sigue siendo, en 2025, una forma de resistencia.

Compartir:

Facebook
Twitter

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Urbanbeat Julio 2024
¡Descarga ahora el último nùmero de nuestra revista!

La Tate Britain crea un diálogo entre Turner y Constable: dos genios del paisaje, un legado que aún incendia la mirada

La Tate Britain inaugura la primera gran muestra dedicada a desentrañar las vidas entrecruzadas y la herencia estética de los dos paisajistas más reverenciados del Reino Unido: J.M.W. Turner (1775-1851) y John Constable (1776-1837). Aunque sus temperamentos y modos de creación no podían ser más opuestos, ambos desafiaron los cánones visuales de su tiempo y alumbraron maneras de contemplar el mundo que aún laten en la sensibilidad contemporánea. Con motivo del 250.º aniversario de sus nacimientos, la exposición traza en paralelo la progresión de sus trayectorias, mostrando cómo fueron aplaudidos, cuestionados y puestos en confrontación, y cómo esa tensión los empujó hacia perspectivas artísticas inéditas. Reúne más de 190 pinturas y piezas sobre papel, desde la trascendental obra de Turner The Burning of the Houses of Lords and Commons (1835), cedida por el Museo de Arte de Cleveland y ausente de Gran Bretaña durante más de seis décadas, hasta The White Horse (1819), uno de los hitos creativos de Constable, no visto en Londres desde hace veinte años. La muestra podrá apreciarse del 27 de noviembre al 12 de abril de 2026.

Muñoz en el Prado: el arte que desestabiliza, interpela y vuelve a casa

El Museo del Prado abre un nuevo capítulo en su historia expositiva con “Juan Muñoz. Historias de arte”, una propuesta extraordinaria que desborda los límites habituales del museo y devuelve al escultor madrileño —fallecido en 2001 y considerado una de las voces más singulares del arte contemporáneo europeo— a las salas que nutrieron su imaginario desde la juventud. A lo largo de las salas C y D del edificio Jerónimos, así como en distintos espacios del edificio Villanueva y en enclaves clave de la colección permanente, se despliega un recorrido en el que Muñoz conversa, interpela y desafía a los maestros del Prado, de Velázquez a Goya, pasando por la tradición renacentista, manierista y barroca.

Los otros habitantes: Matadero Madrid abre la mirada con “The Animals”, la intervención fotográfica de Estela de Castro en Nave 15

Matadero Madrid inaugura una de sus intervenciones más singulares hasta la fecha: “The Animals”, la serie de retratos que la fotógrafa y activista Estela de Castro despliega en la fachada de la Nave 15, transformando el espacio público en un inesperado umbral de encuentro entre ciudadanos y animales rescatados. Por primera vez desde su conversión en centro cultural, el complejo interviene arquitectónicamente este edificio con una propuesta visual de gran formato y vocación ética.

París reimagina el mañana: ilusiones recuperadas y futurismos posibles en la sexta Biennale Némo

Hasta el 11 de enero de 2026, París y su constelación metropolitana laten al ritmo de la sexta edición de la Biennale Némo, que este año despliega su imaginario bajo el lema “Les illusions retrouvées. Nouvelles utopies à l’ère numérique”. No se trata solo de un festival: es un archipiélago de experiencias repartido por veinticuatro espacios, una cartografía expandida donde lo real y lo hipotético se tocan. Bajo la dirección de Gilles Alvarez y José-Manuel Gonçalvès, y con la producción del Centquatre-Paris, la Bienal Internacional de Artes Digitales de Île-de-France se entrega a la tarea de imaginar utopías posibles en medio del vértigo tecnológico.

“Isidre Nonell mirando a Goya”: el arte como espejo de la soledad y la rebeldía

El Museo Lázaro Galdiano de Madrid acoge, desde el 18 de noviembre hasta el 18 de enero, una exposición excepcional:”Isidre Nonell mirando a Goya”. Un encuentro entre dos artistas separados por más de un siglo, pero unidos por una sensibilidad semejante hacia lo trágico y lo marginal. Una conversación entre épocas que revela, bajo la luz de la pintura, una misma vocación ética: mirar al ser humano desde su herida, desde la belleza que nace del sufrimiento y la compasión.

“Artes de la Tierra”: una ecología del arte contemporáneo

El Museo Guggenheim Bilbao presenta “Artes de la Tierra”, una ambiciosa exposición que explora la relación entre el arte contemporáneo y el suelo como territorio físico, simbólico y ecológico. La muestra, concebida en el marco del compromiso institucional con la sostenibilidad ambiental, propone una lectura expandida de las prácticas artísticas que, desde mediados del siglo XX hasta la actualidad, se han acercado a la materia terrestre —tierra, hojas, ramas, raíces o textiles— no como simples materiales, sino como aliados sensibles en un ecosistema compartido. La exposición podrá apreciarse del 5 diciembre, 2025 al 3 de mayo, 2026.

También te puede interesar

Emprender sin relato es gestión; con arte y cultura, es construcción de un sentido empresarial sólido

Hay procesos que, por exceso de uso, empiezan a vaciarse de sentido como por ejemplo, lo relativo a la simbiosis entre cultura y empresa. Dos términos que, en apariencia, ocupan continentes distintos: uno remite a la lenta sedimentación de símbolos, hábitos y memorias compartidas; el otro, a la velocidad del riesgo, a la alquimia de la incertidumbre de una oportunidad de negocio. Sin embargo, en la práctica contemporánea, ambos conceptos se encuentran en un territorio común marcado por una pregunta decisiva: ¿Qué tipo de sociedad construimos cuando no alentamos la fusión de la creación cultural con el emprendimiento empresarial bajo criterios coherentes?

El Círculo de Bellas Artes presenta “Extrema rareza” de Flannery O’Connor en el marco de la celebración de su centenario

Hablar de Flannery O’Connor es adentrarse en esa Norteamérica donde la salvación y la bala comparten bolsillo, donde la Biblia se empuña con la misma firmeza que un revólver oxidado. Su obra, inscrita en el gótico sureño, no necesita artificios para exponer la grieta: allí están los predicadores itinerantes, los fanáticos que confunden la fe con la coacción, los racistas de misa dominical y los desheredados que avanzan hacia la desgracia como si respondieran a un designio inapelable. Bajo el título “Extrema rareza”, el Círculo de Bellas Artes homenajea a la escritora estadounidense en dos jornadas que tendrán lugar los días 27 y 28 de noviembre.

Donde el cuerpo se vuelve campo de batalla: violencia sexual contra hombres en conflictos bélicos

En cada guerra hay zonas prohibidas, espacios donde el lenguaje parece romperse, porque la realidad desgarradora que intenta nombrar excede su capacidad de entendimiento semántico. Uno de esos territorios, quizá el más silenciado, es la violencia sexual ejercida contra hombres. Durante décadas se la relegó al terreno de lo impensable, como si la virilidad fuese un escudo ontológico frente al crimen. Pero la guerra de Ucrania ha levantado ese velo con la frialdad brutal de las cifras y el peso inapelable de los testimonios. Los casos de los que hablamos no sólo se circunscriben al conflicto en Ucrania, también en ocurrieron en la la guerra de Bosnia (1992-1995) y en los conflictos bélicos en la República Popular del Congo.

La Tate Britain crea un diálogo entre Turner y Constable: dos genios del paisaje, un legado que aún incendia la mirada

La Tate Britain inaugura la primera gran muestra dedicada a desentrañar las vidas entrecruzadas y la herencia estética de los dos paisajistas más reverenciados del Reino Unido: J.M.W. Turner (1775-1851) y John Constable (1776-1837). Aunque sus temperamentos y modos de creación no podían ser más opuestos, ambos desafiaron los cánones visuales de su tiempo y alumbraron maneras de contemplar el mundo que aún laten en la sensibilidad contemporánea. Con motivo del 250.º aniversario de sus nacimientos, la exposición traza en paralelo la progresión de sus trayectorias, mostrando cómo fueron aplaudidos, cuestionados y puestos en confrontación, y cómo esa tensión los empujó hacia perspectivas artísticas inéditas. Reúne más de 190 pinturas y piezas sobre papel, desde la trascendental obra de Turner The Burning of the Houses of Lords and Commons (1835), cedida por el Museo de Arte de Cleveland y ausente de Gran Bretaña durante más de seis décadas, hasta The White Horse (1819), uno de los hitos creativos de Constable, no visto en Londres desde hace veinte años. La muestra podrá apreciarse del 27 de noviembre al 12 de abril de 2026.

Scroll al inicio

¡Entérate de todo lo que hacemos

Regístrate en nuestro boletín semanal para recibir todas nuestras noticias