
Beki, la IA para gestionar el miedo y entrenar tus emociones.
Por Fer Enis.
Me llevó 25 años de estudio ver esto y cómo la teoría del miedo se aplica a todas las teorías científicas, filosóficas y creencias religiosas.
No fue que hace 25 años me dije “ah, voy a estudiar el miedo”, no, fue algo que se fue develando en una serendipia y casualidades que me iban surgiendo a medida que investigaba, me analizaba a mí mismo y a los demás, y ejercía en mi vida de facilitador.
El problema es que no me sirve de nada saber esto si los demás no lo comprenden. ¿De qué sirve ver la matrix si los demás no la ven? Así que decidí ser el portero de este nuevo mundo, mantener la puerta abierta y ayudar a cruzarla.
Así entendí que el amor es una forma de miedo, el universo está emocionado e impulsado por el miedo, todo lo que hace tu cuerpo y tú, sin que te des cuenta, es usar el miedo para equilibrarse. En fin, que el miedo es un demiurgo, o causa de todo.
Claro, suena a locura tropical, a arrogancia argentina, y sí, lo es, hasta que lo comprendes.

El miedo te puede esclavizar, de hecho, lo hace. Tú, ni yo, ni nadie podemos prescindir de él; no se puede dominar, eliminar, ignorar, superar, y tantas cosas que se dicen por ahí de cómo debemos actuar con él.
¿Sabías que un tomate tiene miedo? ¿O que los átomos del tomate están acojonados?
Para entender esto y aplicarlo a toda la existencia, desde una partícula subatómica a una galaxia y todo el universo mismo, voy a darte la definición de lo que para mí es el miedo.
El miedo es la respuesta que tiene la naturaleza a un desequilibrio, a la incertidumbre y a la escasez. O sea, yo, tú, la humanidad, una montaña, un lago, un planeta a 4 millones de años luz de la Tierra, en fin, toda la materia y energía del universo estamos sometidos a esta fuerza. Esto puede explicar el poder, las guerras, la desigualdad, el cambio climático y todo lo que quieras poner en la bolsa de las desdichas que afrontamos.
Me imagino lo que estarás pensando al leer esto. Mira, una vez estaba dando una charla sobre a un grupo de empresarios y se me acercó una chica, joven, bonita y emprendedora, y me dijo que ella no tenía miedo, que lo había superado y por eso era una empresaria de éxito con una familia con dos niños estupendos, casa, coche, etc.
Yo le dije: “Vale, entonces hoy no vas a comer y supongo que mañana tampoco y que no duermes nunca”. Ella me miró extrañada y me dijo: “¡Claro que voy a comer! De hecho, me estoy muriendo de hambre ahora”.
“Ok. Mira, suponte que estás en una visita turística con un grupo en el Sahara y de pronto te distraes y el grupo se va y te deja sola en el desierto. Al principio crees que podrás salir de alguna manera de esa situación, pero al cabo de unas horas empiezas a sentir sed y hambre, eso mismo que quizás sientes ahora. Pero ahora sabes que al mediodía vas a comer. De manera que la homeostasis de tu cuerpo será equilibrada; o sea, tu cuerpo siente miedo, tus órganos, tus células te reclaman alimento, energía, proteínas o lo que sea, entonces vas y comes. Pero en el Sahara, ese miedo de tu cuerpo llega a tu conciencia y te aterra la posibilidad de morir”.
Por eso creé Bekind, que es una plataforma para que puedas aprender a domesticar tu miedo, hacerlo tu amigo, tu aliado, “surfearlo” y convertirlo en un superpoder. Y lo hacemos con nuestro chatbot Beky, que es una IA con la que puedes hablar de todo lo que te afecta en el día a día y ella te da información desde la teoría del miedo. También impartimos talleres presenciales donde nos dedicamos a jugar como niños, que es la mejor forma de aprender: emocionándonos. También acabo de escribir un libro donde explico toda la teoría desde diversos puntos de vista, tanto científicos como filosóficos y hasta matemáticos. Sí, como lo oyes, ya que hemos desarrollado una fórmula, y lo que en el futuro próximo será la guinda de la tarta: un juego online donde podrás ser parte de conflictos cotidianos y tomar decisiones buenas y malas con la asistencia de Beky, y entrenarás tus emociones y aprenderás a ser una persona más buena, ética e inteligente. Y lo mejor es que lo harás sin herirte ni herir a nadie.
Tengo una frase muy dura, pero creo en ella y dice: “Tu vida será en vano si no entiendes qué es el miedo y cómo domesticarlo”. Ahí está nuestra responsabilidad. Porque no es la guerra o una pandemia, el cambio climático, el hambre, la desigualdad y tanta calamidad que asola al mundo. Podemos ser sordos, ciegos, mudos y necios ante esta realidad, y aunque no somos culpables, podemos hacernos responsables.

Beky, la Ia para gestionar el miedo en