Urban Beat Contenidos

Las oposiciones judiciales y las expectativas de cuatro mujeres que luchan con vehemencia por conseguir un equilibrio

En España, el acceso a la carrera judicial está marcado por un sistema de oposiciones que, aunque históricamente ha garantizado una cierta objetividad y transparencia, se ha convertido en un elemento cada vez más cuestionado por su desconexión con la realidad social. El perfil profesional que resulta de este sistema contrasta, en muchos aspectos, con las competencias y cualidades que la sociedad demanda actualmente de los jueces, magistrados y simpatizantes de ámbito jurídico. Este artículo contiene cuatro imágenes de mujeres de distintos ámbitos geográficos que asentadas en España, intentan abrirse camino en la carrera judicial, con todas las problemáticas que conlleva ser mujer, ser inmigrante y poder entender un sistema jurídico ajeno a sus países de origen. La imagen que encabeza este artículo corresponde a Mei Ling , nacida en China en la región autónoma de Xinjiang. Llegó a España cuando tenía 3 años gracias a la adopción de una familia de Toledo, su sueño siempre ha sido ser fiscal, actualmente está a punto de conseguirlo gracias a una vocación sin fisuras y una férrea disciplina. No es muy partidaria de la política de Xi Jinping porque denota un régimen totalitario, con culto excesivo-enfermizo a la personalidad del héroe y que limita de manera arbitraria la libertad de expresión de 1.409.670.000 de habitantes autóctonos del Gigante Asiático: “Xi Jinping lleva en el poder desde 2012 y puede ser reelegido con descaro como presidente, sistemáticamente y sin restricciones de mandato, a mí, honestamente, esto me parece no solo poco democrático sino bochornoso sustentado con las ínfulas de una dictadura post-comunista enmascarada con la economía de mercado y la eficiencia de los tecnócratas afines al régimen”, sentencia Xi Jinping, sin despeinarse. Las imágenes han sido generadas por IA para preservar la identidad de las participantes y de paso, preservar la ley de protección de datos.
Genya Petrova nació en el seno de una familia rica de Moscú hace 50 años en el ámbito de la exclusiva Barvikha. Cursó Magisterio con honores y trabajó durante un largo periodo de tiempo como doctora en Filología Hispánica en la Universidad Estatal de Moscú, hasta que todo se torció cuando se enamoró de una mujer y Putin le hizo la vida imposible. Genya Petrova es una inmigrante rusa en España que está a punto de presentarse a las oposiciones para Juez en la Ciudad Autónoma de Melilla. Ha sido increpada con violencia en plena calle por ser “rusa”, ha sufrido acciones muy violentas nacidas en la “ruso-fobia” heredera de la guerra en Ucrania.

Las oposiciones a la carrera judicial y fiscal consisten principalmente en superar una serie de exámenes orales y escritos, centrados en la memorización literal de un temario amplio —que incluye Derecho Civil, Penal, Procesal, Constitucional, Administrativo, entre otros—. El proceso puede extenderse durante años y exige una dedicación casi exclusiva. Este modelo premia la capacidad memorística, la resistencia psicológica y la constancia, pero deja en segundo plano otras habilidades cruciales para el desempeño judicial moderno.

En consecuencia, los aspirantes que logran superar esta carrera de fondo suelen presentar un perfil técnico muy sólido desde el punto de vista del conocimiento jurídico, pero no necesariamente cuentan con experiencia práctica en la aplicación del derecho, ni con competencias como la empatía, la comunicación efectiva, la inteligencia emocional o la comprensión del contexto social y humano que rodea los conflictos legales.

Alika es nigeriana y aún se está recuperando emocionalmente de la “ablación del clítoris” que sufrió cuando era una niña, de la mano de un familiar cercano. Está de paso en España haciendo un máster en jurisprudencia europea coordinado por la embajada de la República Democrática del Congo.

En las últimas décadas, la sociedad española ha experimentado una transformación profunda en su visión sobre la justicia. El auge de los medios de comunicación, la digitalización de la información y la creciente conciencia sobre los derechos individuales y colectivos han elevado las expectativas de los ciudadanos respecto al papel de los jueces.

Hoy en día, no se espera únicamente que un juez “sepa Derecho”, sino que entienda el impacto humano de sus decisiones, actúe con sensibilidad social y sea capaz de comunicar con claridad y cercanía. Se valora, además, su capacidad para gestionar adecuadamente los tiempos procesales, entender la realidad plural y compleja del país y resolver los asuntos con un enfoque más pragmático que formalista.

En este contexto, surgen dudas razonables sobre si el modelo actual de oposiciones es el más adecuado para formar a los jueces que la sociedad necesita.

Otro problema asociado al modelo de oposiciones es su coste económico y personal. Preparar las oposiciones requiere, en la mayoría de los casos, el apoyo de una familia que pueda sostener económicamente al opositor durante varios años, así como el acceso a academias especializadas o preparadores personales. Este filtro socioeconómico limita la diversidad en el acceso a la carrera judicial y puede consolidar un perfil homogéneo, desconectado de la pluralidad de la sociedad española.

La falta de diversidad —no solo en términos de clase social, sino también de género, origen, experiencias vitales y profesionales— repercute en la sensibilidad del sistema judicial ante realidades distintas y en su capacidad para entender problemáticas específicas como la violencia de género, la discriminación estructural o las desigualdades territoriales.

Este debate no es nuevo, y algunos expertos y asociaciones judiciales llevan años reclamando una reforma del sistema de acceso a la judicatura. Una opción sería complementar las oposiciones tradicionales con pruebas prácticas, entrevistas personales, o incluso valorar experiencias profesionales previas en el ámbito jurídico o social.

Además, se podría revisar el temario para hacerlo más dinámico, actualizarlo en función de los retos contemporáneos (como la inteligencia artificial, el derecho ambiental o los derechos digitales) y fomentar metodologías que premien el razonamiento jurídico, la capacidad de mediación y la toma de decisiones responsables.

También sería importante garantizar una formación continua y una evaluación periódica de las competencias profesionales, una vez ingresados en la carrera, para asegurar que los jueces se mantengan al día con las demandas de una sociedad en constante evolución.

El desajuste entre el perfil técnico que fomentan las oposiciones a la carrera judicial y el perfil humano y social que la ciudadanía espera de sus jueces es una cuestión que merece un debate profundo y sin prejuicios. Garantizar la independencia judicial no debería estar reñido con la adaptación a los nuevos tiempos ni con la necesidad de formar a profesionales más cercanos, plurales y comprometidos con la realidad social del país.

Revisar el modelo de acceso no implica perder calidad ni rigor, sino reconocer que la justicia no es solo una cuestión de normas, sino también de personas. Y en esa tarea, España tiene todavía mucho camino por recorrer.

María Julia tiene 85 años , nació en Quito, Ecuador, ahora a pesar de las reticencias de sus familiares ha decidido opositar como Juez en Madrid , donde vive gracias a una herencia millonaria de su marido muerto durante la Pandemia del Covid. Sabe que sus ojos están cansados pero su alma y su mente están claras. Para ella lo importante no es conseguirlo, sino intentarlo. Tardó 7 años en graduarse en Derecho en la Complutense, y ahora afronta un desafio que solo ella entiende. Nunca es tarde, si la dicha es buena. María Julia denota que Daniel Noboa, podría ser su hijo, por tanto "le queda mucho por aprender".

Compartir:

Facebook
Twitter

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Urbanbeat Julio 2024
¡Descarga ahora el último nùmero de nuestra revista!

Big Five: el privilegio en Eurovisión frente al abismo del genocidio cometido por Israel contra los niños palestinos

Eurovisión nació como un pacto de fraternidad cultural en un continente que acababa de desangrarse en guerras y ultraderecha fehaciente y despiadada. Con los años, ese festival se transformó en un escaparate de colores, identidades y canciones que traspasan fronteras. Y en el centro de todo, los Big Five —Alemania, Francia, Italia, Reino Unido y España— sostuvieron con su dinero y su tradición el andamiaje de la fiesta. Ellos fueron los guardianes del espectáculo, dueños de un privilegio singular: pase directo a la final, asiento asegurado mientras el resto pelea en semifinales. Pero hoy, ese poder comienza a resquebrajarse, porque lo que parecía un juego inocente se cruza con la crudeza de la historia. España ha decidido con un valor inconmensurable abandonar Eurovisión si Israel participa, en respuesta al genocidio que asola Gaza.

El régimen genocida de Israel allana la casa del director de cine palestino Basel Adra, ganador de un Oscar por “No other Land”

El ejército de Israel ha allanado la casa del director de cine Bassel Adra en Cisjordania mientras colonos invadían su aldea y familiares cercanos resultaban heridos. Los militares interrogaron a su esposa y revisaron su teléfono ante la inocencia atónita de su hija de nueve meses. El estado genocida de Benjamín Netanyahu le persigue para capturarlo y acallar de manera violenta su voz valiente y su corazón comprometido con la causa palestina. El cine, en manos de Basel Adra, se convierte en un territorio donde lo íntimo y lo colectivo se entrelazan, donde la herida se transforma en relato y la injusticia deja de ser silencio para volverse memoria. Este joven cineasta palestino, nacido en 1992 en el pequeño pueblo de Masafer Yatta, al sur de Hebrón, nunca imaginó que su camino acabaría iluminado por la estatuilla dorada de Hollywood. Y sin embargo, con “No Other Land” —documental que retrata la lucha de su comunidad frente a la amenaza de desalojo por parte del ejército israelí— logró lo impensable: llevar el eco de una tierra arrasada hasta el escenario de los Oscar 2025, donde obtuvo el premio a Mejor Documental.

charlie kirk

El eco violento: lo que revela el tiroteo a Charlie Kirk

El asesinato de Charlie Kirk —activista conservador de gran influencia, voz prominente del ala más radical del trumpismo y aliado cercano de Donald Trump— no es solo un atentado individual. Es un síntoma inquietante de la enfermedad democrática que carcome a Estados Unidos y amenaza con propagarse como un virus global. Lo ocurrido en Utah Valley University obliga a mirarnos al espejo: si esto es posible, ¿qué impide que escalemos hacia una violencia política cada vez más frecuente, explícita y brutal?

turistificacion del trabajo

La turistificación del trabajo: el infierno disfrazado de paraíso

La turistificación del trabajo describe un fenómeno creciente en el que las dinámicas del turismo se trasladan al ámbito laboral. Igual que las ciudades se transforman para atraer visitantes, muchos empleos se rediseñan bajo la lógica de la experiencia, la temporalidad y la espectacularización. El trabajador se convierte en anfitrión de sí mismo: siempre disponible, sonriente, flexible y consumible. El espacio de trabajo se viste de escenario y la productividad se mide también por su atractivo y capacidad de seducción. Así, el empleo deja de ser solo una actividad productiva para convertirse en un producto que debe venderse y exhibirse.

fernando santiago riera

Fernando Santiago Riera: “La ciudad que queremos recuperar”

Abogado, experto en vivienda entre otros muchos ámbitos del mundo de la consultoría y Director de su propia empresa -UROSA TARGET GROUP-, Fernando Santiago Riera invoca en este artículo de opinión a la necesidad de reformas estructurales y cambio en el paradigma en el enfoque de la gestión de algo tan fundamental como es la vivienda y la forma en cómo abordamos esta cuestión como sociedad.

Greta Thunberg se sube a la “Global Samud Flotilla” porque callar, sería peor, que arriesgarlo todo

El nacimiento de un símbolo pocas veces responde al azar. En ocasiones, la historia selecciona a sus protagonistas con la precisión de un bisturí democrático y azaroso, dotándolos de una claridad que resuena en medio del ruido ensordecedor del mundo contemporáneo, injusto, en colapso, y repleto de muertos por guerras arbitrarias, fascistas y cuyo desarrollo, parece normalizado por la sociedad occidentalmente avanzada que no se acuerda del Holocausto de Hitler y por eso lo normaliza, dando la espalda al genocidio de Gaza. Greta Thunberg, nacida en Estocolmo en 2003, es uno de esos casos donde la biografía íntima se entrelaza con una necesidad colectiva de una voz imprescindible. Su figura valiente y poderosa emerge como un espejo que refleja las contradicciones de nuestra época: el progreso tecnológico que nos envenena, la política que confunde la retórica con el compromiso, la sociedad atrapada entre la urgencia climática y el hedonismo cotidiano que se nutre de racismo, prejuicios, violencia y apatía manifiesta. Greta Thunberg se sube a la “Global Samud Flotilla” porque callar, sería peor, que arriesgarlo todo.

También te puede interesar

“Poeta [perdido] en Nueva York”: Lorca revive en un viaje escénico y sensorial por la Gran Manzana

El teatro Fernán Gómez. Centro Cultural de la Villa abre sus puertas a una nueva temporada con un proyecto que promete sumergir al público en los pliegues más íntimos de uno de los autores más universales de la literatura española. La Sala Jardiel Poncela acoge “Poeta [perdido] en Nueva York”, una adaptación teatral de “Poeta en Nueva York” de Federico García Lorca, que permanecerá en cartel hasta el 19 de octubre. La compañía andaluza El Aedo Teatro, con su habitual meticulosidad en dramaturgia y puesta en escena, aborda este monólogo íntimo que entrelaza los versos desgarradores del poemario con las cartas que Lorca escribió a su familia desde la Gran Manzana.

“Drama 1882”: Wael Shawky reinventa la memoria y el poder a través de una poderosa ópera visual

En el Museo Stedelijk de Ámsterdam se despliega hasta el 26 de octubre de 2025 una de las videoinstalaciones más ambiciosas del arte contemporáneo: “Drama 1882”, de Wael Shawky. El artista egipcio, reconocido internacionalmente por su capacidad de entrelazar historia, mito y política, presenta aquí una obra a gran escala que explora la construcción de la memoria, el poder y la representación de los acontecimientos históricos. La pieza ya había sido celebrada en la 60.ª Bienal de Venecia, donde el Pabellón Egipcio la acogió como uno de los hitos más destacados de la muestra.

“La bola negra”: el cine de Los Javis viaja entre el acervo lorquiano y la reivindicación queer

En el horizonte del cine español se avecina un proyecto que genera expectación y debate: “La bola negra”, la nueva película dirigida, escrita y producida por Javier Calvo y Javier Ambrossi. Los cineastas, conocidos por su capacidad de aunar emoción, riesgo narrativo y estética singular, se sumergen esta vez en un terreno movedizo de memoria, deseo y herencia cultural, inspirándose en un germen creativo de Federico García Lorca. Apenas cuatro páginas de una obra inconclusa del poeta bastan para que los directores construyan un relato fílmico ambicioso y profundamente íntimo. Según han declarado los directores, es la primera vez que asumen en un proyecto, un personaje protagonista explícitamente gay.

Íñigo Navarro presenta “Ayer pisó tu sombra un tigre”, un diálogo entre Goya y la nueva figuración europea

En el Museo Lázaro Galdiano de Madrid se abre un paréntesis extraordinario para la pintura. Del 26 de septiembre al 23 de noviembre, en la Sala Pardo Bazán, se presenta la primera exposición institucional en España de Íñigo Navarro (Madrid, 1977), uno de los artistas figurativos más cotizados en la escena internacional. La muestra, bajo el título enigmático “Ayer pisó tu sombra un tigre”, propone un diálogo entre sus grandes lienzos y piezas maestras de la colección permanente, entre ellas la obra de Francisco de Goya, faro inevitable en el recorrido.

Scroll al inicio

¡Entérate de todo lo que hacemos

Regístrate en nuestro boletín semanal para recibir todas nuestras noticias