¿Cuáles fueron los orígenes y primeras influencias musicales que impulsaron tu entrada en el mundo de la música?
Empecé tocando la batería con 13 años. Con 14 años estaba tocando en una banda con mis amigos y un año después empezamos a dar conciertos donde nos dejaban. Después grabamos algún disco, hicimos alguna gira y nos hartamos a tocar. Las primeras influencias fueron las bandas que íbamos descubriendo poco a poco, sobre todo bandas de metal, hardcore, rock. Ya en la universidad me fui adentrando en otros territorios como el jazz, la electrónica o la música experimental.
¿Qué formación musical, ya sea autodidacta o académica, has recibido y cómo ha influido en el desarrollo de su estilo?
No tengo ningún título; yo estudié Químicas. He dado algunas clases particulares, pero la mayor parte lo he aprendido de manera autodidacta. Cogiendo libros de armonía, teoría musical, etc. y destilando lo que me interesaba. Después aprendiendo cosas por aquí y por allá sobre grabación, producción o mezcla. Realmente lo que más me ha influido es escuchar y transcribir canciones o pasajes de mis artistas favoritos e irlos incorporando a mi vocabulario.
¿Qué momentos o hitos considera fundamentales en la evolución de tu carrera profesional?
Creo que mi carrera no es tan amplia y no tengo tanta perspectiva ahora mismo como para decir ninguno en concreto. Hasta ahora lo veo más como un continuo, una secuencia de momentos que se van sumando y desembocan en otros, espero, más importantes. Supongo que si tuviera que elegir uno sería el momento durante la pandemia en que decidí dejar todos los proyectos en los que estaba y empezar con el mío.
Tu última creación “Patterns” es una valiente y vanguardista experimentación que derrocha sensibilidad y nos lleva a un viaje de gran emoción ¿Cómo fue el proceso de gestación de dicho proyecto?
No recuerdo el punto exacto, pero en un momento dado de 2023 me di cuenta de que tenía suficientes ideas, unas 25-30 como para intentar sacar adelante un disco. De ahí empecé a trabajar en algunas que me transmitían un poco más que otras y así empezaron a cristalizar en “Patterns”. Sí que fue un proceso de mucha soledad e introspección, también de muchísimas horas de escucha. Después lo grabé entre mi casa y algunos estudios en dos etapas.
¿Podría describir la importancia de los proyectos, bandas o colaboraciones en los que ha participado y cómo han marcado tu trayectoria?
Si hablamos de mi proyecto, hasta ahora solo he colaborado con Blackpanda en mi primer EP y con Adrián Canoura en la parte visual de “Cenizas”. En ambos casos disfruté y aprendí mucho.
En tus creaciones musicales se fusiona la música electrónica y la música instrumental contemporánea ¿Cómo definiría su estilo musical y qué elementos lo diferencian dentro de la escena actual?
Yo lo defino como música instrumental en su sentido más amplio. Son los instrumentos los que están en el centro del proyecto. Por un lado, la parte acústica con instrumentos como el piano y por otro, la parte electrónica, sobre todo sintetizadores. En este proyecto aparecen también algo de percusión, cellos y voz, pero tratada como un elemento ambiental, de textura, más que melódico.
¿Qué desafíos ha enfrentado en la industria musical y cuáles han sido las estrategias que le han permitido superarlos?
Diría que todavía no he superado ninguno. Lo más difícil de vencer es la indiferencia. Hay gente que necesita que un proyecto llegue a través de ciertos canales, ciertas personas o medios que de alguna forma lo validan; de otra forma no te hacen caso. Creo que la música no está en el centro del debate y hay otros factores menos importantes que sin embargo se tienen en cuenta antes. También, hay mucha gente que toma decisiones en la industria musical que no ha cogido un instrumento en su vida. Hay una falta de empatía tremenda.
¿De qué manera ha influido la innovación tecnológica y la digitalización en la producción y difusión de su música?
Trabajo y grabo mucho en mi casa, pero uso la tecnología que está disponible hoy en día para prácticamente cualquier músico. El material que tengo es de lo más normal, de hecho mi espacio de trabajo es mucho más sencillo de lo que la gente se espera cuando escucha mi música. No tengo un estudio lleno de instrumentos y cacharros.Tengo 3 o 4 que son lo que uso.
¿Cómo han contribuido sus experiencias en giras, conciertos y festivales a su crecimiento profesional y a la consolidación de su imagen artística?
Supongo que a poder ahora manejar mi proyecto de manera independiente. Poder editar mi propia música y cerrar mis propios conciertos.
¿Qué proyectos o metas futuras tiene previstos para continuar evolucionando y enriqueciendo su legado musical?
Me gustaría explotar al máximo el proyecto a nivel de directo; tocar en el máximo número posible de sitios, si se da la oportunidad. Por otro lado, de cara a los siguientes proyectos me apetece trabajar con gente distinta y en espacios distintos.
Acerca de la sala Réplika: https://replikateatro.com/









