Julmud es una de las figuras más representativas del undergrund palestino y uno de los productores más creativos y talentosos de los últimos años. Presenta en La Casa Encendida Tuqoos, su álbum de debut; un trabajo compuesto por 15 temas para subvertir las formas de encierro en los territorios ocupados.
El sonido de Julmud no deja a cualquier mente curiosa indiferente. Tuqoos es un proyecto de 15 temas basado en ritmos pesados que doblan el espacio y el tiempo para alterar las formas de encierro en los territorios ocupados.
Los sonidos tienen una textura casi granular y detallada, al tiempo que mantienen un flujo rítmico cautivador a través de densas líneas de bajo y una dulzura amarga en las melodías, desdibujando las líneas entre estar en una esquina de la calle, en una manifestación o en un club.
Producido en Ramala (Palestina), Tuqoos se enfrenta a un espacio inaccesible, resistiendo las condiciones de un cuerpo en captura a través de sonidos que se transforman, se deslizan y crean rupturas en tiempos y espacios que permanecen ocupados.
Julmud es un productor, percusionista, teclista, vocalista e investigador musical radicado en Ramallah, Palestina. Su música, no adscrita a ningún género, está compuesta por sampleos y sonidos de todo el mundo. Ha producido trabajos para diferentes artistas como Haykal, Al Nather, Muqata’a, Makimakkuk o Walaa Sbait, entre otros, que también forman parte de su equipo.
Sobre Electrónica en Abril 2024
El colectivo artístico barcelonés Jokkoo comisaría por tercer y último año el festival. Jokkoo apuesta por artistas con diversidad de raíces, una fuerte identidad sonora y un enfoque singular a la hora de crear proyectos inspirados en gran parte por sus culturas de origen.
El artista y productor palestino Julmud, una de las figuras más representativas del panorama ‘underground’ y radicado en Ramala, presenta su álbum de debut: un trabajo compuesto por 15 temas para subvertir las formas de encierro en los territorios ocupados.
El legado cultural del continente africano llega a La Casa Encendida a través del sonido del francés Aho Ssan y de Nsasi, embajador musical del sonido alternativo de Uganda. Ambos presentan en España sus últimos trabajos.
Ulla presenta la propuesta más ‘ambient’ con su trabajo en torno a la electroacústica y el jazz experimental, mientras que Chuquimamani remezcla la música ceremonial del pueblo Aymara (América del Sur) y la productora y dj afroportuguesa Nídia acerca los ritmos del ‘tarraxo’ a La Casa Encendida junto a la baterista Valentina Magaletti.
Por primera vez, el festival organiza dos talleres: una introducción a la música electrónica DIY para aprender a hacer sintetizadores caseros de la mano de Afrorack, quien ofrece también un concierto En Familia, y un taller de escucha impartido por el colectivo Banda.
Como broche a su etapa de comisariado, Jokkoo inaugura Electrónica en Abril con una pieza propia, fruto de una residencia artística en Kenia. Un trabajo que aborda los efectos del colonialismo, del capitalismo y de su inherente extractivismo, pero también de la resistencia ante estas constantes amenazas.
“Con este cartel cerramos una colaboración con La Casa Encendida en la que hemos podido traer a un espacio tan representativo muchos y muchas de las artistas que están contribuyendo a diseñar no solo el sonido del futuro sino de un futuro más representativo, abierto y heterogéneo.
El crudo e impactante live de Klein retumbando en el auditorio, acompañada de un micro y una guitarra eléctrica; el hipnótico show the Nkisi que nos llevó a una especie de trance colectivo; la fascinante actuación de Nsdos que se metió a todo el patio en el bolsillo con sus sonidos generados por sensores colocados por el cuerpo; la psicodélica de Susso que nos dirigió al éxtasis con su excitante singeli; o el sonido glitchy y sofisticado de Loraine James mostrándonos cómo suena el futuro… Archivos y momentos que se quedarán en nuestras memorias y en nuestros cuerpos por mucho tiempo”. Jokkoo.
Jokkoo es un colectivo artístico musical de Barcelona que nace hace seis años con la intención y la necesidad de investigar y difundir los sonidos electrónicos más contemporáneos y la escena experimental y alternativa del continente africano y su diáspora. La ausencia de estos sonidos y corrientes en eventos locales y clubs del circuito europeo les llevó como colectivo a crear conexiones y espacios donde las estéticas musicales no hegemónicas se pusieran en el centro. Han trabajado en clubes y salas como Razzmatazz, Apolo o Sala Vol y en festivales de música como el Nyege Nyege o Sonar+D. Asimismo, han colaborado con instituciones culturales como el Macba, el Convento de Sant Agustí, el Museo Reina Sofía, La Casa Encendida o el Museo de Arte Contemporáneo de Burdeos. El colectivo, que actualmente cuenta con seis miembros, está formado por Baba Sy, Maguette Dieng (Mbodj), Oscar Tylor (Opoku), Nicolas Belliot (Mookie), Ismäel Ndiaye (B4mba) y su más reciente incorporación, Miriam Camara (TNTC). Seis personalidades distintas con el objetivo común de establecer la música híbrida electrónica negra y las narrativas diaspóricas en la comunidad musical mundial.