Se considera una mujer con carácter fuerte, pero a la vez sensible y bastante inquieta con las cosas que le apasionan. Amante del mundo del espectáculo, Bego Salazar se siente atraída y unida con los suyos a través de la pasión que comparte con ellos: la música. Criada en un entorno familiar flamenco, la cantante salmantina recuerda su infancia con su padre escuchando los discos de todos los genios flamencos del momento.
- Este proyecto musical nace junto a tu compañero Xavi Lloses, dando como resultado “Salazar”, ¿cómo fueron vuestros comienzos? ¿En qué momento decidís unir vuestro talento para formar este nuevo concepto de música?
Después de 7 años en el mundo de la música creando mi camino como interprete, sentí la necesidad de poner mis pensamientos sobre el papel y convertirlos en canción.
Estaba como loca buscando un productor diferente que me inspirara con nuevos sonidos, ya que siempre había estado rodeada de flamenco o de música más folclore y necesitaba conectar conmigo misma sin ningún tipo de pretensión en algún género musical en particular. En ese momento me hablaron de Xavi Lloses y directamente cogí un tren hasta San Felíu de Guixols para conocerlo. Desde el principio hubo buena química y rápidamente nos lanzamos a trabajar juntos al estudio. Después de 3 días de “no entendimiento”, antes de marcharme de vuelta a casa, me puse a improvisar y Xavi empezó a seguirme con el piano. Hubo un flechazo espectacular, y en ese momento entendimos que íbamos a iniciar un nuevo camino juntos.
- Esta música experimental e híbrida que acompaña al género flamenco, ¿surge de manera espontánea o es algo que estudias y trabajas junto a Xavi? ¿Cómo definirías, por lo tanto, el género musical de “Salazar”?
Siempre creamos desde la improvisación, luego trabajamos la melodía a través de recursos literarios y melódicos. Salazar es una mezcla de quejios con decibelios, una mezcla entre lo minimalista, lo flamenco y lo urbano, sin dejar atrás la electrónica o la música clásica.
- ¿En qué momento creativo te encuentras? ¿Qué proyectos te aguarda este nuevo año 2022?
Estoy en un momento de creación e introspección constante que intento usar para sanearme y crear mi próximo disco.
- ¿Cómo descubres el mundo de la música? ¿Qué te lleva a dedicar todo tu esfuerzo y tiempo a esta profesión?
En mi casa siempre ha estado muy presente la música. Mi abuelo cantaba por fandangos y su hija -mi madre Manuela- canta con el alma y con una fuerza arrolladora. Siempre después de comer había un “cantecito” en la cocina.
Dedicarme a esta profesión surge en Madrid cuando estaba rodeada de los grandes del flamenco. Pienso que realmente, no es algo que puedas planear, la música te señala y te pone a prueba dándote varias oportunidades. Ojalá a mí me dé muchas más.
- ¿Qué o quién te inspira?
Mi Madre Manuela, las personas auténticas y la música creada con el alma.
Salazar – Tú no me conoces.
- La situación sanitaria que vivimos el año pasado y que a día de hoy nos mantiene en un marco histórico diferente a lo que conocíamos, nos ha hecho reencontrarnos con nosotros mismos y explorar nuevas facetas. ¿Qué sacas en positivo de los meses de cuarentena? ¿Has desarrollado algún trabajo a raíz de esta situación excepcional?
Me sirvió para disfrutar más el silencio, conocerme mejor a mí misma y para mirar el cielo sin reloj. Tuve la suerte de que la cuarentena me pilló viviendo en el campo y me considero una privilegiada por ello. Me encantan los huertos, mimar a las plantas y echar buenos momentos con mis compañeros peludos.
- En algunas de tus canciones, incluyes y defiendes temas sociales. ¿Qué cuestiones tienes en mente para tus próximos proyectos? ¿Qué hace que Begoña Salazar se rebele?
De alguna manera siempre me he sentido un poco “oveja negra” y pienso que somos las personas claves que favorecen a nuestro entorno y espacio, y viceversa. Siempre con respeto claro.
Para mí, ¡la música es la mejor aliada para esa revelación de la que me hablas!
María Casajust.
1 comentario en “Bego Salazar y Xavi Lloses forman el grupo “Salazar”, una fusión que reúne el “quejío” flamenco con los decibelios.”
Toda una experiencia disfrutarlos en directo. Rebosan talento. Una simbiosis perfecta entre ambos