Que la periferia madrileña da señales, desde hace unos años, de transformación social y cultural, gracias a la presencia de numerosos artistas y galerías, es una realidad incontestable. Hablamos de una novísima hornada de creadores emergentes o consolidados que han ido abandonando los históricamente bohemios barrios del centro, en una diáspora producida por la gentrificación, que la ciudad ha experimentado en las dos últimas décadas.
El muy cacareado ya barrio de Carabanchel, ha sido uno de los primeros en apostar por alojar una escena cultural emergente que además de hacer más grande la ciudad, y dar cabida a creadores en busca de más espacio, sea capaz de interactuar con la comunidad, estableciendo un diálogo y convivencia con el barrio, al tiempo que genera nuevas oportunidades de emprendimiento cultural.
Tetuán es otro de los barrios que últimamente suenan, en el ámbito artístico. Estudios de artesanos, diseñadores, movimientos asociativos o galerías de arte experimentales han consolidado su presencia, formando parte de la vida del barrio, sin alterar su identidad.
Es el caso de Estudio Impropio. Lo componen un conjunto de artistas de distintas nacionalidades, creando un cosmopolita crisol de mestizaje e interculturalidad. Ellos son Lío (@lio_arte), Álvaro Sánchez del Castillo (@alvarosanchezdelcastill), Luis Martínez Muñoz (@luismartinm147) Krishna Estruel (@krishnaestruel), Jesús Guerrero y Aner.
Conversamos con ellos de su iniciativa y recorremos un estudio lleno de vitalidad, energía y proyectos de lo más sorprendentes.
La pintura y la escultura son a grandes rasgos las principales disciplinas que podemos encontrar en Estudio Impropio; un lugar que aunque no está abierto al público como una galería al uso, realiza múltiples exposiciones donde se produce ese necesario encuentro con el público, el mundo de las galerías y los coleccionistas. Muestras que se reanudarán tras el verano y que indudablemente ponen de manifiesto la pluralidad que se desprende de la obra de estos jóvenes creadores que conviven en este escenario.
Aunque el local ya existía y estuvo dedicado a fines similares, en los últimos años, fue abandonado. Y fue entonces, hace algo menos de cuatro años, cuando estos autores decidieron reimaginar el concepto de laboratorio y estudio de arte, convirtiéndolo en este lugar que expresa por sí mismo, la voz y el discurso de una generación de creadores que pide paso. Los componentes de Estudio Impropio no funcionan como un equipo o grupo. Son artistas independientes unidos en torno a un espacio y en el que el diálogo está presente, fomentando un convivencia creativa, pero sin liquidar la identidad y el relato de cada uno de ellos.
Estudio Propio es un espacio abierto para otros artistas o artesanos de cualquier disciplina que precisen de un espacio para la creación. Una apuesta por la diversidad que propicia esa imagen vibrante y electrizante de la que hemos sido testigos, y que inexorablemente quedará atrapada en la agenda de exposiciones que veremos allí a partir de septiembre. Las actividades que en Estudio Impropio se produzcan serán organizadas por el ecosistema cultural BOOM! Art Comunity.
Sobre BOOM! Art Comunity
Boom! Art Comunity es un ecosistema cultural creado y dirigido por Kiki Pertíñez. De origen venezolano, Pertínñez apuesta por impulsar la carrera de artistas, artesanos y otros tipos de profesionales de la creación. Entre sus compromisos, Boom! Art Comunity propicia escenarios de encuentro entre público, galeristas y coleccionistas con artistas de origen latinoamericano.