Cinco bailarinas y un actor que tienen una relación con trastornos mentales protagonizan Kill me; la continuación de dos obras anteriores de Marina Otero, ya exhibidas en Madrid dentro del Festival de Otoño de 2022, Love me y Fuck me. Las tres forman parte del proyecto Recordar para vivir, en el que la creadora nacida en Buenos Aires en 1984 se propone presentar diferentes versiones de obras hasta el día de su muerte. Kill me, que estrena en España, en Teatros del Canal de la Comunidad de Madrid, el próximo 18 de junio y permanecerá en cartel hasta el 23 de ese mes.
Poniendo en el centro de Kill me la salud mental, Marina Otero trabajó “con diferentes trastornos de la personalidad, cada una (de las intérpretes) con sus diagnósticos”, señaló en una entrevista con el diario argentino Página 12. “Yo tengo uno, pero no lo voy a decir para no spoilearlo”, añadió.
Marina Otero es intérprete, autora y docente vive actualmente en Madrid. Sus espectáculos han recorrido el mundo, presentándose en Alemania, España, Italia, Francia, Suiza, Portugal, Singapur, Dinamarca, Bélgica, Austria, Grecia, Polonia, Israel, Sarajevo, Perú, Chile, Colombia, México, Brasil, Uruguay y Argentina.
La primera de las piezas del proyecto Recordar para vivir fue Andrea, el nombre de una prostituta, cuya biografía exponía Otero en escena. Luego vino Recordar 30 años para vivir 65 minutos, premio a la Mejor Dirección en Danza en la Bienal de Arte Joven 2016 (Buenos Aires). En esas dos obras la creadora se expresaba con una danza extrema, violenta, brutal.