Este it-bag tan elegante y parisino acompañará a la perfección su imagen vibrante gracias a su diseño distintivo y femenino. Sus líneas elegantes, estructuradas y suaves de piel de becerro lisa y ligeramente patinada destacan la tradición artesana de Longchamp, y son el complemento para cualquier look, desde el más desenfadado al más refinado. Como por arte de magia, la vista queda atraída hacia el medallón metálico XXL con el caballo y jinete Longchamp, el dúo emblemático siempre en movimiento que simboliza la energía y el optimismo contagiosos de la Maison.
Gracias a su paleta de colores, que van de los más pop hasta los pastel, Box-Trot se hace con el tema de la temporada: el Glamping. Ya sea en rosa palo o en color natural con detalles multicolor, acompañará a todos los looks chic o bohemios. Con un vestido largo de algodón y zuecos, y Box-Trot cruzado a un lado, la mujer Longchamp emana una sensación de ligereza y libertad de movimiento. Desplazándose montada en bicicleta por las calles de la ciudad, tanto la versión en lona de algodón del bolso como su versión de piel (tan parisina) zigzaguean por el tráfico.
Con sus colores vibrantes, Box-Trot expresa su alegría de vivir. Un medallón con el logo del caballo de carreras del mismo tono firma los colores frescos y deliciosos que son rosa caramelo y amarillo limón, mientras la versión en naranja incluye este mismo accesorio en color dorado. Si se lleva cruzado, Box-Trot aporta estilo al tomar un helado en la playa, energía al bailar bajo las estrellas con un vestido crepé hecho un remolino, y da vida a un atuendo sencillo.
Tan atemporal como moderno, Box-Trot, atrevido y dinámico, es la mejor forma de conquistar los horizontes de estilo para el verano.